lunes, 15 de julio de 2013

Donde caben dos ya no caben tres

Decía el filósofo francés Rousseau que ‘’ la más antigua de todas las sociedades y la única natural es la familia’’. La familia, que en los tiempos que vivimos, se ve muchas veces vulnerada y ultrajada pese a ser la forma más natural de crecimiento demográfico.
Se me hace curioso ver como el partido que en España defendía y hacia bandera de valores como la familia, ahora es el primero en despreciarlos. Tal vez no les viniese mal pensar, que la mayoría absoluta que ahora les hace gobernar, en gran medida se la dieron aquellas familias que esperaban no sentirse más humilladas y desatendidas. Las mismas a las que hoy ellos están dispuestos a sacrificar.
Como si con la crisis las familias no hubiesen sufrido ya suficiente, ahora el Gobierno de Castilla y León pretende someterlas nuevamente a otro golpe de gracia. Aquellas con más de 3 hijos; las que proporcionalmente aportan más al consumo, las que más grabadas se ven por los impuestos indirectos y a fin de cuentas, las que más se sacrifican en el relevo generacional de este país. A partir de este próximo viernes día 5, si nadie dispone lo contrario, se verán obligadas a un nuevo desvelo más, el de pensar en cómo poder mandar a sus hijos a la universidad. ¿O acaso no es deber y derecho de los padres preocuparse por el mejor futuro de sus hijos? Esto será gracias a la eliminación de las exenciones fiscales en la matrícula de la universidad para las familias numerosas


Llegados a este punto, no puedo por menos que expresar mi descontento y desaprobación a esta medida que el Partido Popular de Castilla y León quiere aprobar este viernes. Y desde estas líneas, sumándome a la preocupación de miles de personas, pido a sus miembros y al presidente Herrera, que decidan seguir el camino correcto y justo, no el fácil. Que no lastren más a las familias que ya se encuentran endeudas hasta el cuello y piensen en el futuro de aquellos que dentro de muy poco deberán hacerse cargo de este país y contribuir a la Hacienda Pública.


De no ser así será verdad lo que irónicamente decía Wiston Churchil que ‘’ un político se convierte en estadista cuando comienza a pensar en las próximas generaciones, no en las próximas elecciones’’. Entonces quizás este país y sus comunidades necesiten un gobierno tecnócratas. Un gobierno que piense en los números y los datos que más convienen a un país, no solamente en los de su propia jubilación y los ahorros de su cuenta bancaria.

Guillermo Garabito